La Paeria de Lleida declara en ruina inminente las dos naves calcinadas

El Ayuntamiento de Lleida ha decretado en ruina inminente las dos naves que se quemaron la madrugada del domingo al lunes en el Polígono industrial Les Canals de Lleida. Ambos locales han quedado irrecuperables y, según el informe municipal, deben derribarse. Tan pronto como sea posible el propietario deberá gestionar la demolición -porque las dos construcciones han colapsado estructuralmente-.

Las tenientes de alcalde Begoña Iglesias y Cristina Morón explicaron este pasado martes a los propietarios de las naves contiguas cuál es el procedimiento a seguir, dado que la estructura de los almacenes puede tener alguna afectación en las construcciones a raíz del incendio y asegurar que no haya ningún riesgo.

Por el momento, han podido acceder a sus respectivos locales de forma puntual y acompañados de los agentes de la Guardia Urbana. La voluntad es que las empresas que trabajan puedan recuperar su actividad lo antes posible.

El informe técnico municipal establece que también es necesario mantener la seguridad en el perímetro de las naves sucesivas por lo que se mantendrá la señalización para reducir el peligro en torno a los dos almacenes quemados. Están ubicados en una manzana de locales delimitada por las calles Canals, el Regueró, el Vertador y la Brida. Se trata de un bloque de 8 naves, que están distribuidas en un total de 14 almacenes, y en cada finca se ha informado de cuáles son los pasos que se tendrán que dar para garantizar la seguridad y conciliarla con la actividad .

Cabe recordar que el fuego se originó sobre la una y media de la madrugada del lunes y se dio por extinguido el lunes en torno a las 14.30 h. Se quemaron las dos naves y tres vehículos. No se han lamentado daños personales. Los Mossos d'Esquadra se encargan de la investigación para esclarecer qué ha provocado el incendio.

Más incendios

No es el único incendio que ha azotado Lleida en los últimos días. De hecho, este martes hubo un incendio de vegetación en Tudela de Segre (Lleida), que afectó a 11,25 hectáreas agrícolas.

Los Agents Rurals señalaron una máquina recolectora de cereal como principal hipótesis del origen del incendio ya extinguido. Los Bombers de la Generalitat activaron hasta 19 dotaciones, entre las que había medios aéreos y tractores que han arado para facilitar los trabajos.